La moda en los últimos años ha cambiado mucho, no solamente en el mundo, sino también día a día en nuestro país. Las fast fashion nos da la posibilidad de tener ropa más linda a mejores precios en mucho menos tiempo pero, de la misma forma, nos ha dejado sin ciertas emociones que pueden extrañarse de vez en cuando.
Hace ya varias lunas llego a mí, por medio de una amiga, una nueva propuesta de diseño de alta moda, de esas que no veía hace ya mucho; y, no solamente por el diseño y la identidad de marca, sino por toda la experiencia que me permitió vivir, volver a vivir.
Y es que si alguna de ustedes ya lo ha vivido, y tal vez muchas sólo lo han vivido una vez en su vida, para el gran día de su boda... Pero ser parte del proceso de ver un vestido hecho a medida hacerse realidad y vivir cada detalle, desde la tela que más nos guste, el proceso de toma de medidas, las pruebas que definirán el resultado y finalmente el gran día en que llevamos esa creación... Es algo que todas deberíamos poder volver a vivir cada cierto tiempo.